Simposio Diversidad y Objetividad Religiosa: La ecología de las religiones

El jueves y viernes 5 y 6 de agosto se realizó el Simposio Diversidad y Objetividad religiosa donde se desarrollaron diversas disertaciones de especialistas de Colombia, Argentina, México y Brasil, quienes abordaron temas medulares acerca del conocimiento, las prácticas, las instituciones y la diversidad religiosa.

Kali Yuga Pavana Mitra Das de la Universidad de Cartagena en Colombia, disertó en este espacio de reflexión y debate sobre el tema Ecología de las Religiones.

El evento virtual fue organizado por el Programa de Filosofía de la Universidad de Cartagena, la Red Colombiana de Filosofía de la Religión, el Grupo de estudios en Filosofía de la Religión y Mística Darsana y la Revista Horizonte Independiente, con el apoyo de LATAM Bridges in the Epistemology of Religion de la University of Houston y la John Templeton Foundation.

En su Ponencia sobre el tema “La ecología de los saberes religiosos”, Kali Yuga Pavana Mitras Das, devoto de Conciencia de Krishna, expuso acerca de la existencia de diferentes tradiciones, creencias y experiencias religiosas quienes afirman tener contacto epistémico con la fuente última y suprema de la realidad, de la que todo depende.  Sin embargo esta afirmación epistémica encontró, entre otros obstáculos importantes, un problema fundamental en la multiplicidad y, a primera vista, incompatibilidad de sus diferentes aproximaciones.   

“La mayoría de los místicos y practicantes religiosos se refieren a la naturaleza última de la realidad desde perspectivas aparentemente contradictorias: entre otras, como la vacuidad última del nirvana, como la consciencia impersonal vasta en la que todos participamos o como un creador personal infinitamente perfecto”, considera.

Kali Yuga Mitras Das, agregó en su disertación que incluso las religiones personales o teístas, aunque coinciden en afirmar la omnipresencia, omnipotencia, omnisciencia y absoluta bondad de este Ser Supremo, “lo describen a través caracterizaciones diversas y posiblemente contradictorias: como una grandiosa mente inmaterial, como un padre misericordioso, como un rey o amo que debe ser adorado con temor y reverencia, como el niño más dulce y juguetón, e incluso como el amante de muchas jovencitas y mujeres casadas. Más aún, en ocasiones es considerado como tres personas divinas o como la pareja suprema”, describe el devoto.

No obstante si se consideran las aproximaciones incompatibles de una misma realidad no pueden constituir acceso verídico a semejante realidad. “Es por esta razón que la mayoría de propuestas filosóficas que analizan el fenómeno religioso coinciden en favorecer ya sea su contacto real con el Ser Supremo o aceptar la diversidad”, señala.

Algunos autores mantienen lo primero en tanto que afirman que la diversidad solo atañe a las diferentes formas lingüísticas que intentan describir la misma experiencia religiosa de lo vivido, la cual termina encontrándose más allá de nuestros conceptos (Smith 1987, Smart 1999).

“A partir de la idea kantiana de una constitución conceptual de nuestra experiencia, otros autores articulan el fenómeno en términos de una realidad única que se experimenta y conceptualiza múltiplemente, pero que termina estando más allá de nuestro conocimiento (Hick 1989)”, analiza Kali Yuga Pavana Mitra Das.

Otros van más allá de lo anterior y sostienen que la diversidad se aplica a nuestros conceptos y experiencias y también a sus objetos (Katz 1978). “Lo que implica que las diferentes tradiciones religiosas no hablan de lo mismo, esto es, de la realidad suprema, o que, si intentan hacerlo, terminan siendo en su mayoría falsas (Alston 1991, Plantinga 2000)”, indaga.

El propósito de este artículo es proponer un marco de explicación integracionista que puede dar validez tanto a la diversidad como a la objetividad y veracidad de las diferentes concepciones religiosas. “Una perspectiva bajo la cual la realidad suprema puede ser experimentada y comprendida, siguiendo las palabras de los mismos místicos, de forma infinita e inagotable (Gellman 1997)”, propone el filósofo.

La ecología de los saberes religiosos es la propuesta integracionista que se basa en diferentes aproximaciones de la experiencia y del conocimiento en términos activos, corporizados, extendidos (Ryle [1949] 2005, Wittgenstein PI, OC, Taylor 1985, Varela, Thompson & Rosch 1991, Clark & Chalmers 1998, Gallagher 2018, 2020), múltiples y esencialmente limitados (Santos 2016, 2018).

Lo anterior comprende a las diversas tradiciones y experiencias religiosas como conjuntos de conocimientos prácticos y corporizados que intentan dar cuenta de diferentes dimensiones y características de la realidad última, constituyendo una ecología epistémica de recuentos múltiples, interactivos y potencialmente complementarios.

¿A qué hace referencia el concepto ecología de las religiones?

La ecología de las religiones hace referencia a cómo todos los seres tenemos que interactuar de forma armoniosa dentro de un contexto donde vivimos y existimos con nuestros propios propósitos e intereses y las formas diferentes de ver el mundo.

En toda ecología se da una armonía sistémica y global entre las distintas formas de habitar el mundo, a pesar de que los sujetos y las comunidades sean diferentes se puede lograr esta armonía. Entonces aplicando este concepto al mundo de los saberes religiosos, se considera esta metáfora para comprender las diferentes formas de interactuar con la realidad trascendental y divina desde las distintas características que cada religión concibe e interactúa con la divinidad de formas diversas, tomando por ejemplo rasgos personales como padre, como hijo, como amigo, como rey o amante, e incluso interpersonales como la naturaleza, el vacío y el cosmos.

¿De dónde tomó el concepto de ecología de las religiones?

El concepto de ecología de las religiones lo tomé del sociólogo portugués Boaventura de Sousa Santos que desarrolla el concepto de epistemologías del sur, que son aquellas invisibilizadas por el colonialismo y que se desarrollaron en diversas partes del mundo, en Africa, Asia y en América del Sur.

Por ejemplo lo que sucedió en el caso de las comunidades indígenas tienen su cosmovisión, saberes y conocimientos pero que el colonialismo ha tratado de invisibilizar y erradicar considerando que no son verdaderos.  Entonces este sociólogo desarrolló el concepto epistemología del Sur para darles un reconocimiento y una validez a este conocimiento junto con el conocimiento científico. También habla de la ecología de las religiones, donde hay diferentes tipos de conocimientos uno al lado de los otros que componen una ecología donde interactúan como sujetos y comunidades vivientes.

¿Considera que se puede lograr una armonía entre las distintas religiones?

Considero que sí se puede lograr una armonía bajo una perspectiva que contemple la ecología de los saberes, la cual el sociólogo portugués Boaventura de Sousa Santos, resalta particularmente el tema de que todo tipo de conocimiento es limitado, es decir no puede captar todas las facetas del mundo, por eso existen diferentes tipos del conocimiento para el mismo mundo. Y esto aplicado al rango del estudio de las religiones, se traduce que ninguna religión o aproximación mística va a tener un conocimiento acabado, porque lo divino es esencia es infinito. Y es contradictorio plantear lo infinito desde una perspectiva finita, entonces todas las religiones siendo captaciones de esa realidad infinita, pueden captar sus rasgos específicos, dependiendo de la interacción con esta realidad y se puede dar una armonía donde las distintas religiones capten estos rangos de la divinidad  y puedan obtener un conocimiento ético, moral, místico, vinculado con la forma en que vivimos y habitamos este Planeta, y de cómo interactuamos con las demás personas, con los animales y el mundo. Y también nos brindan herramientas para desarrollar amor por Krishna, por las demás personas y por uno mismo. Esos conocimientos pueden ser armonizados con todas las demás religiones porque cada una capta rasgos similares y coherentes en relación a lo divino que ayudan al desarrollo de la humanidad.  

Algo del autor.

Kali Yuga Mitra Das (Juan D. Morales) se doctoró en filosofía en la Universidad Nacional de Colombia. Actualmente es docente e investigador del Programa de Filosofía de la Universidad de Cartagena. Ha trabajado especialmente en temas de filosofía de la mente y de la ciencia, y dentro de sus intereses se encuentran la epistemología, la ética medioambiental y animal, el pensamiento de Wittgenstein, la filosofía del amor y la filosofía de la religión. Se encuentra desarrollando una perspectiva corporizada y emergentista de la mente con miras a analizar sus aplicaciones en las ciencias sociales, la ética y la religión. Entre sus publicaciones encontramos los libros The Emergence of Mind in a Physical world (2018) e Imágenes de la mente en el mundo natural (2014, con Raúl Meléndez et ál.).

Entrevista: Ragatmika Bhakti Dd